Las mujeres indígenas representan más del 80% de las mujeres en el municipio de Silvia-Cauca.

Nini Yohana Niquinas es una mujer indígena Ambaló que participó en el proyecto. Su involucramiento permitió conocer las actividades y la organización de su comunidad, mientras aprendía herramientas para desarrollar autonomía económica a través de su emprendimiento.

Vivian Andrea Tombé es una mujer indígenea Misak que participó en el proyecto.

A través del proyecto, ellas aprendieron a sacar provecho económico de sus actividades tradicionales, como la agricultura y la artesanía, fortaleciendo así su independencia.

Miriam María Aranda es una mujer indígenea Misak que participó en el proyecto. Su involucramiento permitió conocer las actividades y la organización de su comunidad, mientras aprendía herramientas para desarrollar autonomía económica a través de su emprendimiento.

Generar ingresos por medio de sus actividades ha incrementado su autonomía.

La participación de mujeres indígenas evidenció su liderazgo en territorios, hogares y comunidades, resaltando su rol clave en la preservación cultural y el desarrollo social.

El liderazgo o participación de las mujeres en la comunidad está sesgada por los roles de género.

Mercedes Tunubalá fue alcaldesa de Silvia, Cauca. Al ser una mujer Misak, simboliza un avance en el liderazgo femenino para las comunidades tradicionales.

El proyecto se realizó entre la Universidad del Valle y Casa Mujer formando y capacitando a las mujeres de las comunidades indígenas.

Las mujeres están tomando roles de liderazgo en sus comunidades, mostrando que su contribución va más allá del hogar y es clave para el crecimiento y sostenibilidad de su pueblo.

Las mujeres indígenas conservan la tradición de sembrar y trabajar la tierra, gran parte del alimento que consumen en sus hogares provienen de esta actividad.

Como parte del proyecto, se entregó una oveja para aumentar la producción de lana y vender los productos elaborados con ella.

El tejido tiene gran importancia en las comunidades indígenas, siendo una forma de expresión que representa conocimiento, creación y más.

Se debe reconocer el valor de la mujer indígenas en diversos ámbitos de la organización social, para lograr un avance como comunidad.

Como parte de las estrategias, se busca resaltar el potencial del tejido para generar fuentes de ingresos.

Silvia es un municipio del departamento del Cauca, donde predomina la población indígena.

Las principales preocupaciones fueron alrededor de cómo generar ingresos para el hogar.

El tener diferentes mujeres de comunidades indígenas permitió un intercambió de saberes.

La conexión con la naturaleza—el agua, la tierra y los animales—es fundamental en las creencias indígenas, lo que inspira un profundo respeto y un compromiso con su protección y conservación.